Monterosso al Mare es la ciudad más grande de Cinque Terre con una amplia playa cuyos primeros signos históricos datan de 1200. La ciudad está dividida en dos por un promontorio con un túnel de unos cien metros, por un lado la zona residencial de Fegina , por el otro el puerto viejo donde se encuentra el centro histórico.
En el área de Fegina, donde se encuentra la estación de tren, hay muchas estructuras turísticas residenciales, una larga playa y una estatua original de 14 metros de altura, Il Gigante, que representa al dios Neptuno.
Originalmente el hombre esculpido apoyado en la roca sostenía una enorme concha que servía de terraza con vistas a la homónima playa de Neptuno. Desafortunadamente, durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, la estatua resultó dañada y la terraza se derrumbó y nunca fue restaurada.
A partir de aquí comienza un camino un tanto cansado pero con una vista maravillosa que en aproximadamente una hora de caminata conduce a Punta Mesco y luego, finalmente, en otra hora y media a Levanto.
La zona del antiguo puerto está llena de "caruggi", típicas callejuelas estrechas de Liguria, donde se pueden encontrar bares de vinos, restaurantes, focaccerie y heladerías.
También para llegar a Monterosso recomiendo usar el tren. En coche hay que salir en el peaje A12-Carrodano, ir a Levanto y continuar hasta Cinque Terre.
Monterosso es el único pueblo de las Cinque Terre que tiene a su disposición una auténtica playa donde bañarse y tumbarse durante unas horas de relax, ideal después de pasar un intenso día de paseo para visitar y descubrir estos fantásticos lugares únicos en el mundo. La última de las cinco tierras comenzando desde el sur, o la primera comenzando desde el norte, es de poca importancia porque son las cinco para ver al menos una vez en la vida.
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