En la antigüedad se llamaba Montecatini Val di Nievole y fue capital de un municipio autónomo hasta 1940. Desde el 4 de junio de 1898, viajar en los trenes rojos Gigio & Gigia es la forma más romántica y agradable de admirar el valle y llegar al pueblo medieval... #UNESCO #tuttitaly
Hay lugares que tienen el poder de devolverte la paz con el mundo, y Montecatini es definitivamente uno de ellos. Situada en la hermosa Valdinievole, este destino toscano ofrece una combinación perfecta de los beneficios de las aguas termales y el encanto atemporal de un pueblo medieval.
Comenzando desde el corazón palpitante de Montecatini Terme, las Termas Tettuccio se elevan con gracia ofreciendo sus aguas regeneradoras listas para ser disfrutadas. El antiguo complejo termal es un oasis de tranquilidad y bienestar, donde el cuerpo y alma pueden encontrar alivio y regenerarse gracias a la pureza de las aguas que fluyen desde hace siglos.
Una experiencia imperdible es el viaje en funicular que conecta Montecatini Terme con el encantador pueblo de Montecatini Alto. A bordo de los trenes rojos Gigio y Gigia, cuyas historias se entrelazan con la del territorio desde hace más de un siglo, se puede admirar el espléndido panorama de Valdinievole que se va revelando a medida que se asciende. Una vez llegados al pueblo medieval, uno puede sumergirse en la sugerente atmósfera de las callejuelas empedradas y los monumentos históricos que cuentan la rica historia de Montecatini, rozando antiguas murallas y admirando la majestuosidad de la Torre del Mastio y la Rocca.
La verdadera joya de Montecatini Alto es la pintoresca 'Piazzetta Giusti', un lugar de encuentro y socialización para turistas y lugareños. Rodeada de restaurantes típicos y cafeterías, ofrece la oportunidad de degustar las delicias de la gastronomía local y saborear las clásicas obleas de Montecatini, un dulce símbolo del pueblo.
Además de las principales atracciones turísticas, como la Torre del Carmine y la fortaleza pentagonal, Montecatini Alto ofrece una inmersión en las atmósferas del pasado, transportando a los visitantes de vuelta en el tiempo a la Edad Media. Pasear por sus calles es como emprender un viaje en el tiempo, una oportunidad única para descubrir la historia y la cultura de este fascinante destino toscano.
Otro lugar imperdible para visitar es la Iglesia de San Pietro Apostolo. Este edificio, rico en historia y arte sacro, alberga preciosas obras de arte que cuentan antiguas atmósferas medievales.
Montecatini Terme y Montecatini Alto se presentan como una combinación perfecta, donde la relajación y la tranquilidad de los baños termales se fusionan con la historia y el encanto del pueblo medieval, ofreciendo una experiencia inolvidable y un viaje emocionante por las bellezas de la Toscana.
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