Decir Materdomini es como decir san Gerardo Maiella, un misionero redentorista conocido en todo el mundo como el santo patrón de las madres, los niños y las parturientas.#tuttitaly
Materdomini se encuentra en la provincia de Avellino, en una colina que domina el comienzo del valle superior del Sele. Con 735 habitantes, el lugar toma su nombre de una antigua capilla dedicada a Santa Maria Materdomini.
En 1742, la capilla fue encomendada al arzobispo de Conza, Sant'Alfonso Maria de'Liguori, fundador de la Congregación del Santísimo Redentor. Flanqueaba un Convento del que partían los Misioneros Redentoristas para su labor evangelizadora en beneficio de los pueblos de Irpinia y del Valle de Sele.
Uno de los Misioneros fue San Gerardo Maiella. Conoció a los sacerdotes redentoristas en 1748 y, en contra del consejo de su madre, se unió a ellos.
Los superiores lo aceptaron sólo después de mucha insistencia, debido a su frágil salud, y el 16 de julio de 1752 pronunció votos solemnes a la Congregación.
Fue un trabajador incansable, y se le atribuyen varios milagros. Hoy es universalmente invocado como protector de las mujeres embarazadas.
Murió de tisis en el convento a los 29 años, en 1755, y aquí se guardan sus restos, sobre los que se construyó el Santuario.
A partir de 1799, varias familias de Caposelle se trasladaron desde la cabecera municipal a la colina de Materdomini, construyendo allí sus casas. Se configuró así un núcleo habitado que, con los crecientes flujos turísticos vinculados al culto del Santo, experimentó un importante incremento edificatorio. Se calcula que más de un millón de peregrinos acuden cada año a su tumba para venerar sus restos mortales.
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