Dice el Padre Espedito de esta patria de herreros y fraguas: “En este pueblo hay piedras que hablan y cuentan lo que nos rodea, están hasta el canto del agua y el canto del silencio que llevan a toda esta riqueza, a esta memoria... #tuttitaly
El pueblo de Bienno se encuentra en Val Camonica, Lombardía, y es considerado uno de los pueblos más bonitos de Italia. Su historia está estrechamente ligada a la actividad de los artesanos del hierro, que tiene raíces antiguas que se remontan a la época romana. Sin embargo, es durante el período celta que esta actividad comienza.
El trabajo de los artesanos del hierro en Bienno se caracteriza por el trabajo duro, el uso del yunque y el martillo. Solo en el siglo X, con la llegada de los benedictinos, comienzan a utilizarse los molinos de agua. Se descubre que la rueda de agua se adapta perfectamente a la corriente del arroyo Grigna para el funcionamiento del martillo, y comienza a construirse el canal artificial llamado "Vaso Re".
A partir de ese momento, la actividad de la herrería se vuelve central en toda la zona y continúa hasta hoy, a pesar de la crisis que afectó al sector en el siglo XIX.
Hoy en día, es posible descubrir la historia industrial del pueblo visitando los lugares relacionados con esta actividad y caminando por el camino del "Vaso Re", trazado por el agua.
Sin embargo, Bienno no solo es famoso por su actividad de herrería. Su centro medieval, con poderosas murallas de piedra, callejones estrechos, casas altas, portales originales decorados con frisos y escudos de armas tallados en piedra, palacios renacentistas con elegantes logias, iglesias y torres altas bien conservadas, ofrece una atmósfera única.
Durante la última semana de agosto, el pueblo cobra vida con un evento mágico, iluminado por antorchas.
Es la Feria de Artesanía y Antigüedades, a la que asisten cientos de expositores de toda Europa. A lo largo del recorrido en el pintoresco centro histórico, se pueden admirar las creaciones de artesanos y artefactos artísticos.
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