A instancias del Papa San Pío V, la gran Basílica fue construida entre 1569 y 1679... #tuttitaly
La basílica de Santa Maria degli Angeli, ubicada en Asís, fue construida entre 1569 y 1679 por orden del Papa Pío V, con la intención de custodiar las capillas de la Porciúncula, el Tránsito y el Roseto. El proyecto original de Galeazzo Alessi se caracterizó por una rigurosa simplicidad estructural, conforme al ideal franciscano de pobreza.
Debido a los derrumbes del terremoto de 1832, la basílica fue parcialmente reconstruida por Luigi Poletti (1836-1840) en la misma forma. En la parte superior de la fachada, levantada en 1925-1930, se colocó la estatua de la Madonna degli Angeli, realizada por el escultor Colasanti.
En el interior de la basílica, el estilo esencial y sencillo destaca la obra de arte más importante que contiene: la Porciúncula. Esta es la pequeña iglesia, dentro de cuyos muros San Francisco entendió su vocación, acogió a Santa Clara ya los primeros frailes, y recibió el Perdón de Asís.
También en el interior de la basílica se encuentra la capilla del Tránsito, que en su origen fue la enfermería del primitivo convento, y entre cuyos muros murió san Francisco el 3 de octubre de 1226.
A la derecha del ábside de la basílica se encuentra la rosaleda. Según la tradición, una noche, el santo, presa de fuertes dudas y remordimientos por el pecado, se revolcaba desnudo en la espinosa rosaleda. En contacto con el cuerpo del Santo, la rosaleda perdió todas sus espinas, para no causarle ningún daño. Incluso hoy en día, hermosas rosas de diferentes colores y calidades florecen sin espinas.
Luego nos encontramos con la ermita de las rosas, que originalmente fue la casa de San Francesco. Debajo de la capilla hay una especie de cueva que conserva una imagen del santo en oración y los restos de las vigas que formaban el púlpito desde el que anunciaba la gran indulgencia de la Porciúncula.
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