Este majestuoso bosque de árboles monumentales ha sobrevivido intacto desde el siglo XVII a la sombra de sus imponentes "patriarcas", que dan lugar a un grandioso espectáculo de la naturaleza... #tuttitaly
Escondidos en la encantadora Croce di Magara, una aldea de Spezzano della Sila en la provincia de Cosenza, se encuentran los majestuosos Gigantes de Sila. Este bosque de árboles monumentales, intacto desde el siglo XVII, es una obra maestra de la naturaleza, con sus imponentes "patriarcas" que ofrecen un espectáculo atemporal.
La meseta de Sila alberga árboles extraordinarios, alcanzando alturas de hasta 45 metros con troncos de 2 metros de ancho y una antigua edad de 350 años. Estos árboles son testigos de los antiguos bosques de Sila que una vez cubrieron la zona. En el siglo XVII, los Barones Mollo, propietarios del cercano Casino, plantaron más de 60 ejemplares de pinos laricios y arces de montaña, creando un bosque centenario que fue donado al FAI en 2016.
Los antiguos bosques de Sila proporcionaban sustento a los pastores que extraían resina inflamable de los troncos de los árboles, similar al alquitrán. Este recurso valioso llamó la atención del gobierno de Nápoles en los siglos XVI y XVII, lo que llevó a medidas para proteger los árboles de la deforestación excesiva. Durante la Segunda Guerra Mundial, las tierras fueron expropiadas y luego devueltas a la antigua Agencia Estatal de Bosques.
Gracias a la colaboración con la familia Mollo, se creó la Reserva Natural Guiada Biogenética, dedicada al estudio, conservación y protección de este invaluable patrimonio histórico-natural.
Tras la intervención humana, la naturaleza sigue su curso, permitiendo la observación de la evolución del bosque. La reserva ofrece un hábitat natural para especies animales raras, creando una atmósfera de asombro y admiración entre los extraordinariamente hermosos árboles. El FAI garantiza el acceso público y se compromete a restaurar el antiguo Casino Mollo, que pronto se convertirá en el escenario de una narrativa cautivadora sobre la historia de este pedazo de paisaje rural calabrés, desde el siglo XVII hasta la actualidad.
Kommentare