Dominada por la espectacular mole de su famoso castillo, Bardi es hoy un popular lugar de veraneo en una posición panorámica. Prados floridos, riachuelos frescos, hermosos paseos hacen que un recorrido por sus alrededores valga la pena... #tuttitaly
Bardi se eleva 625 m sobre el nivel del mar en el valle superior del Ceno, en la provincia de Parma.
El pueblo está dominado por el imponente castillo medieval, que se eleva sobre un espolón de jaspe rojo.
Hoy tenemos la oportunidad de visitar uno de los castillos más bonitos de Emilia-Romaña, construido a finales del siglo IX para defender a la población local de las incursiones húngaras.
Durante la visita al castillo, podrás recorrer su historia a través de sus distintas estancias: las caballerizas, la hielera, el patio de honor, la plaza de armas, el ala noble, las cocinas y las viviendas. Sin embargo, lo que más impresiona es la Sala de Torturas, un ambiente inquietante que da una idea de la crueldad del pasado.
Además de la antigua fortaleza, merecen una visita los edificios religiosos del pueblo:
- la iglesia parroquial de Santa Maria Addolorata, construida en 1934, alberga una preciosa pintura de Parmigianino que data de 1520 y representa el Matrimonio Místico de Santa Caterina;
- la antigua iglesia parroquial del siglo XVI dedicada a San Giovanni Battista;
- el Oratorio de Santa Maria delle Grazie, construido en la segunda mitad del siglo XIII;
- el Convento de San Francesco;
- la Iglesia de San Siro, construida en estilo románico, probablemente entre los siglos XII y XIII.
Comida típica
Los Crocetti son una especialidad de la tradición culinaria de Bardigian, una vez producidos y consumidos casi exclusivamente en Bardi por las familias propietarias de la plantilla con el símbolo de la familia impreso en ellos.
Yorumlar